A partir del 1 de julio, Evo Banco deja de operar como marca independiente. No es una noticia cualquiera: lo que viene ahora es un cambio real para los clientes, tanto en lo digital como en lo presencial. Bankinter absorbe totalmente a Evo, lo integra en su estructura y lo transforma en un producto más dentro de su catálogo. En la práctica, desaparecen la app y la web de Evo, y todo pasa a gestionarse desde Bankinter.

Esto significa una cosa clara: más servicios, más acceso, pero también más responsabilidad por parte del usuario. Si tenías productos en Evo, toca ponerse al día. No hay que hacer locuras, pero sí entender lo que viene.
Qué cambia para los clientes a partir de julio
La integración va más allá de lo estético. Ya no se podrá entrar ni operar desde la app de Evo, que se cerrará definitivamente. Desde el 1 de julio todo se hace con la aplicación y la banca online de Bankinter. Para muchos, esto será una mejora: la plataforma es más robusta, más completa, y da acceso a una gama de productos mucho más amplia. Pero también puede generar dudas los primeros días.
Lo bueno es que las condiciones de los productos contratados no cambian. Si tenías una cuenta remunerada, un préstamo, una tarjeta o una hipoteca, se respetan los términos actuales hasta su vencimiento. No hace falta firmar nada nuevo. Eso sí, Bankinter puede lanzar nuevas ofertas y productos diferentes, por lo que es buena idea estar atento por si te interesa cambiar o ampliar algo más adelante.
Hay un detalle a tener en cuenta: del 11 al 13 de julio puede haber interrupciones en servicios como Bizum, transferencias internacionales o la posibilidad de duplicar tarjetas. Es un parón técnico para hacer bien la migración. A partir del día 14 todo debería funcionar con normalidad.
Qué ventajas reales tiene la absorción
Aquí es donde entra lo que a veces no se ve a simple vista. Hasta ahora, Evo era un banco exclusivamente digital. Eso tenía sus cosas buenas: agilidad, menos comisiones, gestión sencilla. Pero también dejaba fuera la posibilidad de resolver asuntos en persona, o de acceder a ciertos productos más complejos.
Ahora, con la integración en Bankinter, los antiguos clientes de Evo tendrán acceso a:
- 365 oficinas físicas en toda España
- Nuevos productos como fondos de inversión, planes de pensiones, seguros y bróker
- Tarjetas virtuales y nuevos sistemas de pago
- Servicio personalizado en oficina si lo necesitan
- Atención multicanal con más opciones
Y todo sin perder lo digital. Se trata de sumar, no de restar. El que quiera seguir operando desde el móvil, podrá hacerlo. El que quiera entrar por oficina, también. Es un modelo más flexible y adaptado a distintos perfiles de cliente.
Lo que sí es importante es revisar todo antes del cierre definitivo de la app de Evo. Descarga tus extractos si los necesitas, revisa tus domiciliaciones y asegúrate de tener bien configurada tu nueva entrada a Bankinter. No te llevará mucho y te ahorrarás sustos.
Una operación que marca el rumbo de la banca
La absorción de Evo por parte de Bankinter no es un movimiento cualquiera. Marca una tendencia: los bancos digitales puros tienen mucho valor, pero cuando se integran con bancos más tradicionales ganan en músculo, en cobertura y en estabilidad. Y los clientes, si se hace bien, salen beneficiados.
En este caso, parece que el proceso se está gestionando con cuidado. No se están forzando cambios bruscos ni se están modificando contratos sin aviso. Simplemente, se está dando paso a una etapa más amplia, con más recursos y más posibilidades.
Eso sí, no hay que dormirse. Si eras cliente de Evo, no esperes al último minuto para familiarizarte con la app de Bankinter. Haz el cambio con tiempo, mira bien qué servicios necesitas y qué ventajas puedes aprovechar. Porque muchas veces, lo que marca la diferencia no es el banco, sino cómo lo usas tú.